El gran Sean Connery, alias James Bond muy a su pesar, nos dejó físicamente que no espiritual ni sentimentalmente hace unos días. Gran actor, no sólo por su presencia, que llenaba sin problemas la pantalla, sino también por su facilidad para interpretar los más variados registros. Indudablemente, la fama le vino gracias a su acertada y viril interpretación del genuino James Bond. Pero no por ello debemos olvidar sus acertadas y genuinas interpretaciones interpretando otros personajes, como Guillermo de Baskerville, al padre de Indiana Jones o al sheriff espacial de " "Atmósfera cero", un acertado remake de la aclamada "Solo ante el peligro" de Gary Cooper, solo que con escenario cambiado .
En su vida privada, este ferviente defensor del independentismo escocés y amante del golf, escribió páginas brillantes y otras no tanto, pero, ante todo, como todos nosotros al fin y al cabo era un ser humano,con sus luces y sus sombras; como los demás mortales. Ahora, que su cuerpo se fue, estoy seguro de que su espíritu, seguirá la estela que anteriormente le marcó su compañero de personaje Roger Mooore para encontrarse con el allá arriba . Por cierto, Sean, cuando veas a Roger, recuerda las palabras clave:
