espías, interpretando al anodino y eficaz Harry Palmer, en el lado opuesto del glamouroso James Bond reinante en la época. Si una característica hay que destacar de este genuino actor londinense, es que, como el buen vino no sólo sabe envejecer bien con el tiempo, sino que a medida que éste pasa , nos deleita con esa fragancia que sólo el buen cine deja en nuestros sentidos. Gracias Michael, esperemos disfrutar de tu trabajo mucho tiempo más.
https://es.wikipedia.org/wiki/Anexo:Filmograf%C3%ADa_de_Michael_Caine
.